La exhibición se compone de una instalación de sesenta y cuatro fotografías blanco y negro, un video que se presenta en diálogo con la interpretación en vivo de música paisajista del autor turco Nogard (Cenk Es), una segunda pieza de vídeo compuesta en cuatro partes, que ilustra las relaciones entre naturaleza y tecnología, la vida y nuestras formas de incidir sobre ella, y sobre la que descansa su propuesta de autosimilitud. Por último, una pieza de Realidad Aumentada creada exclusivamente para la exposición junto a una banda sonora que se podrá descargar gratuitamente en sala antes de hacer el recorrido expositivo.
Las imágenes del proyecto se vienen produciendo desde hace 4 años. La exposición por su parte, en palabras del artista, ha sido concebida como un espacio para poner en común “algunas de las piezas que se han comunicado entre sí y que hacen parte de la gran inquietud de buscar patrones autosimilares tanto en la naturaleza humana como en la terrestre sin dejar de lado la experiencia de su propia belleza que por años se ido acumulado durante viajes por distintos lugares del mundo”.